El final de la historia: "Dayron Robles descalificado"

Por: Aliet Arzola Lima, estudiante de Periodismo de la Universidad de La Habana.

 

Las manos sirven para crear y también para destruir, solo que no puedo creer que la mano derecha de Dayron Robles haya obstruido al chino Liu Xiang en la final de los 110 metros con vallas del Campeonato Mundial de Atletismo de Daegu, Corea del Sur.

Por mucho que miro la imagen no percibo tal entrometimiento del cubano en el camino del asiático, aunque el Jurado de Apelación del certamen dice lo contrario y descalificó a Dayron de acuerdo con la regla 163.2, que se refiere a las interferencias durante la
carrera.

Por la reclamación presentada por los chinos tal pareciera que Dayron paró en su fugaz carrera solo porque tenía ganas de agarrar al asiático e impedirle correr, cuando puede ser perfectamente a la inversa. Por ello, la delegación cubana también ha exigido un
nuevo análisis de los hechos al Jurado de Apelación.

Mientras llega el veredicto final, la medalla de oro está en el pecho del estadounidense Jason Richardson (13.16), la plata para Xiang (13.27) y el bronce para el británico Andrew Turner (13.44).

Más allá del lamentable episodio, Dayron mostró hoy al mundo quién es el verdadero amo de las vallas. Esa especialidad es su mundo, allí es rey entre los reyes, monarca olímpico, recordista universal…todo en uno. En la final de hoy tenía a sus rivales de toda la vida: Liu Xiang y el norteamericano David Oliver, pero además aparecían con ímpetu los también norteños Jason Richardson y Aries Merrit.

Solo una arrancada espectacular y un mejor remate después de cruzar la última valla permitieron al guantanamero coronarse con un tiempo nada estratosférico, apenas un 13.14, justificable si tenemos en cuenta que se corría con viento en contra (-1,1 m/s) y en una pista lenta.

Para mi gusto, Dayron Robles no deja margen a las dudas, tiene de todo en su palmarés, el título mundial tarde o temprano llegará y su historia, dorada por los cuatro costados se seguirá escribiendo.

Fuente: CUBADEBATE