Robles,Vallejo,"yo no sé"

Por: Michel Contreras

 

Como Vallejo, Dayron Robles debe estarse diciendo que “hay golpes en la vida tan fuertes… ¡yo no sé!”.

El moreno increíble había entrado primero a la meta de una carrera que esperaban todos. Una carrera que era el centro del día en el Mundial. Alfa y Omega, Omega y Alfa de la tercera fecha. Pero lo descalificaron, y hubo un sueño que se desvaneció después de consumado.

Cuando por la amplificación mandaron a los hombres a los tacos de salida, en los rostros de los corredores se veía la tensión. Cada uno tenía un guión de Hitchcock en los ojos. Inclusive Liu Xiang, el asiático frío. Sin embargo, Dayron era (es) de roble, y apenas se inmutó.

Cuando el “starter” apretó el gatillo, el cubano arrancó como si no le fuera nada en la carrera. Relajado, seguro, y le puso la quinta a la caja de velocidades de sus piernas…

Cuando Robles empezó a rebasar los obstáculos, enseguida se vio que podía. Dos, tres pasos, un salto, dos, tres pasos,de nuevo… y poco a poco fue tomando la cabeza, y Xiang que se le pega, y Robles que resiste, y Xiang, y Robles…En la última valla, el chino trastabilla, mira con desconcierto hacia el costado, y el cubano aprovecha para un remate seco que lo pone a las puertas del cielo. Es la corona que faltaba en su vitrina, y ya la tiene. Es suya al fin.

Pero la felicidad tiene por hábito jugar al espejismo. Poco después de dar la vuelta olímpica, a Robles se le informa de su descalificación. La Comisión Técnica ha aceptado la reclamación de China, y Guantánamo, y Cuba, y usted, y yo, y nosotros, nos quedamos con la mirada opaca y el corazón a media asta.

Son las reglas, y están para cumplirlas. Por lo visto en la cámara lenta, Robles braceó sin orden, le pegó a Xiang en la mano y perdió el cetro. Un cetro que, sabemos, merece por encima de cualquier otro mortal que corra 110 metros con vallas. Un cetro que, de nuevo, ha sido esquivo. Y eso duele. Es un golpe tremendo. “¡Yo no sé!”…

 Fuente: CUBADEBATE