Rey Vicente Anglada,el Mundial de Béisbol en Panamá y algo más
El estelar Rey Vicente Anglada, exmentor de Industriales y del equipo Cuba entre 2006 y 2008, es categórico al opinar que el seleccionado cubano a la XXXIX Copa del Mundo de Béisbol que se disputará en Panamá, será un hueso duro de roer.
En una agradable entrevista con Prensa Latina en la provincia de Colón donde tiene a su cargo el entrenamiento de todas las categorías de menores, el ex segunda base del equipo azul responde a nuestras inquietudes sobre el campeonato mundial que se avecina.
PL.- ¿Piensas que habrá calidad en el torneo?
RVA.- Por supuesto que sí, y los panameños están trabajando para que el certamen sea un éxito. Están acondicionando los terrenos y los trabajos marchan muy bien. La parte organizativa también.
PL.- ¿Se habla algo de la participación cubana?
RVA.- Por supuesto que sí, y bastante. Hay expectativas por ver jugar a nuestros peloteros.
PL.- La competencia será fuerte.
RVA.- Mira, ya todos los peloteros hoy en día son bastante
experimentados y de gran calidad. El béisbol mundial ha tomado un techo bastante alto y los jugadores se preparan mucho para poder entrar a los equipos profesionales.
Eso significa que los conjuntos están más redondeados y las competencias van a ser cada día mucho más difíciles.
PL.- Tus pronósticos para Panamá.
RVA.- Bueno, me parece que todo va a depender de los que puedan participar. Tú sabes que aquí en Panamá los jugadores están sujetos a que sus clubes les den autorización, sobre todo a quienes están en Grandes Ligas, Triple A, y otras.
Yo creo que si todos sus jugadores pueden participar en este mundial va a ser uno de los equipos a tomar en cuenta y la condición de ser sede los estimula y los hace todavía más fuertes.
PL.- ¿Y el equipo cubano?
RVA.- Ahí eso es otra cosa. El béisbol en Cuba es como si fuera una religión. El cubano es pelotero desde que está en el vientre de su mamá y se practica desde muy pequeños, como el fútbol en Brasil.
Si ganamos es fiesta nacional y si perdemos duelo nacional porque no nos gusta perder, y eso todo el mundo lo sabe y lo reconoce.
Pero lo otro que sí te puedo decir es que estoy seguro de que el equipo que venga al mundial va a hacer un gran papel, como todas las selecciones que hacemos en nuestro país.
CUBA Y PANAMÁ
PL.- Bueno, hablando de tu trabajo aquí, ¿qué opinión tienes del béisbol panameño?
RVA.- El panameño juega buen béisbol, pero pienso que los torneos de ellos deberían de durar un poco más porque son demasiado cortos para desarrollar jugadores de talento. Pero condiciones tienen, que es lo más importante.
PL.- ¿Notas alguna diferencia con los jugadores cubanos?
RVA.- La diferencia no está en los jugadores, sino en el sistema. En Cuba le damos un seguimiento muy de cerca a todas las categorías, a lo que llamamos allá la pirámide de rendimiento, y en ese sentido creo que nosotros tenemos ventajas sobre los panameños.
Es decir, el sistema nuestro les da seguimiento a los muchachos desde que son escolares, de manera que cuando llegan a la selección nacional vienen con una gran formación desde la cuna, algo que aquí en Panamá no se puede hacer o mejor dicho, es más difícil hacer.
La provincia en Panamá tiene su forma particular de proceder, mientras que en Cuba hay una integralidad también territorial en la formación del atleta.
PL ¿Esa dicotomía de sistemas ha afectado de alguna manera tu trabajo en la formación de jugadores aquí?
RVA.- En realidad no me ha afectado. He trabajado en todas las categorías sin ningún tipo de problema. Lo que sucede, por ejemplo, es que aquí muchos muchachos vienen al área donde nosotros estamos porque me conocen, aunque estén en algunas academias particulares.
Allá en Cuba, aparte de formarnos como deportistas, tenemos una formación docente y muchos de nosotros somos licenciados en deportes y ese conocimiento, esa experiencia teórica y práctica la aplicamos en el trabajo que hacemos aquí. Ellos lo asimilan.
PL.- ¿Qué haces en estos momentos?
RVA.- Ahora mismo trabajamos en la formación del equipo de 13 y 14 que hacía 30 años no llegaban a una final, y este año logramos que discutieran el campeonato con la provincia de Herrera. Yo creo que eso es una buena demostración de lo que estamos haciendo.
No es mi solo mérito. Es el resultado de un trabajo conjunto con los panameños, aunque el presidente de la liga valoró de excelente el trabajo realizado, distinción que le agradezco mucho.
PL.- También tuviste éxito en tu pase por Bocas del Toro.
RVA.- Sí, es cierto. Allá trabajé dos años con los mayores. El primer año cogimos el tercer lugar, y el segundo año también discutimos el campeonato nacional y todos fueron muy felices porque desde el año 1961 no llegaban a una final.
PL.- ¿Tus planes?
RVA.- Bueno, pienso ir de vacaciones este mes, algo que estoy deseando infinitamente, pero tendré que regresar porque las autoridades de Colón quieren que les haga un trabajo de formación de tres años, y sólo llevo seis meses en la provincia.
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